sábado, 25 de febrero de 2017

Estos son mis diez mandamientos. Jesus Dueñas Munguia

1. RESISTENCIA. Seguir adelante incluso cuando las cosas no van de lo mejor; aceptar que los problemas son normales; recordar que la naturaleza humana es, después de todo, fuerte. No contagiar tus miedos a los demás
2. EMPATÍA. La capacidad de conectarse mentalmente con el sufrimiento y las experiencias únicas de otra persona. El valor de convertirte en alguien más y mirarte a ti mismo honestamente.
3. PACIENCIA. Perdemos nuestros ánimos porque pensamos que las cosas deberían salir perfectamente. La humanidad ha perfeccionado tantas cosas, que cada vez somos menos capaces de aceptar que haya cosas que siguen saliendo mal; como el tráfico, el gobierno, otras personas… Debemos ser más serenos y más tolerantes siendo más realistas sobre cómo las cosas realmente suceden.
4. SACRIFICIO. Estamos programados para buscar nuestro propio beneficio, pero también tenemos una habilidad asombrosa para olvidarnos de nosotros mismos en pro de alguien o algo más. No podremos formar una familia, amar a alguien, o salvar a este planeta si no continuamos practicando el arte del sacrificio.
5. CORTESÍA. La cortesía tiene mala reputación. Muy seguido asumimos que se trata de ser ‘hipócritas’ o ‘falsos’ en lugar de ‘ser como somos’. Sin embargo, dada nuestra verdadera naturaleza animal, debemos tratar de no mostrarla demasiado. Tenemos que aprender modales; no son malos, son las reglas internas necesarias de la civilización. La cortesía está ligada con la tolerancia, la capacidad de vivir con gente con la que nunca estaremos de acuerdo, pero que al mismo tiempo no podemos evitar.
6. HUMOR. Ver el lado gracioso de la vida y de uno mismo no suena muy serio, pero es parte integral de la sabiduría, porque demuestra que podemos aceptar con una sonrisa que hay una diferencia entre lo que queremos y lo que la vida nos ofrece; entre lo que soñamos ser y lo que realmente somos; lo que esperamos de otras personas y lo que realmente hacen. Como la ira, el humor nace de la decepción, pero es una forma óptima de enfocar nuestras decepciones. Es una de las mejores maneras de manejar nuestra tristeza.
7. AUTO-CONSCIENCIA. Conocernos a nosotros mismos es tratar de no culpar a los demás por nuestros problemas y nuestros caprichos; tener una idea de lo que pasa dentro de nosotros mismos, y de lo que realmente pertenece al mundo exterior.
8. PERDÓN. El perdón significa estar consciente de todas las veces en nuestra vida cuando alguien nos dio otra oportunidad. Es reconocer que vivir con otros no es posible si no somos capaces de excusar errores.
9. ESPERANZA. Cómo es el mundo hoy es sólo una sombra de lo podría ser algún día. Apenas estamos en el comienzo de la historia. Al envejecer, la desesperación se vuelve más común, casi instintiva. El pesimismo no es necesariamente profundo, así como el optimismo no es necesariamente superficial.
10. CONFIANZA. Los más grandes proyectos mueren simplemente porque no nos atrevemos a empezarlos. La confianza no es arrogancia, está basada en estar constantemente consciente de lo corta que es la vida y de lo poco que realmente perdemos al arriesgarnos.